Por: Rafael Marrero (08/12/2018)
El día de mañana se realizará las tan criticadas elecciones a Concejales en todo el territorio nacional, un ejercicio necesario y fundamental de Democracia, quizás el más importante de estos últimos 20 años de vida política en el país, exceptuando el proceso electoral donde resultó electo el Presidente Maduro y lógicamente, el proceso que llevó al Presidente Chávez al Poder el año 1998.
Se ha planteado de distintas formas y a través de distintos medios la importancia estratégica y de seguridad para la estabilidad política y la soberanía nacional que representan estas elecciones, de allí lo imprescindible del llamado a salir a ejercer el Derecho al Sufragio, más allá del voto es el ejercicio al Derecho Constitucional que dentro de los Derechos Civiles (en lo que a ciudadanía se refiere) lleva la punta de lanza, ya que es a través de este Derecho que se adecua la forma de vida y la existencia del régimen democrático.
Ahora bien, pareciera que la manipulación de la derecha llega al extremo de intentar hacernos declinar incluso a ese Derecho fundamental para el estatus de ciudadano con la intención de deslegitimar un proceso electoral argumentando la poca participación y lo peor de todo es que nos prestamos, en medio de tanta presión, como tontos útiles de quienes están arrancándonos los recursos de las manos.
¿Acaso han pensado que si participamos activamente y con consciencia en este proceso electoral, pudiera ser el último de este tipo antes de la llegada de una nueva forma de gobierno como lo es el Parlamento Comunal?
Como en todos los procesos, hay que agotar las vías de Ley preexistentes antes de pasar a etapas distintas de desarrollo o de búsqueda de la solución planteada, en ese sentido, nos corresponde salir a sufragar con gallardía, por la opción que sea de su preferencia, con la finalidad de dejar electa, instalada y conformada la Cámara Municipal del Cabildo español, ahora de manera sarcástica pregunto: ¿Si no tenemos Cámara Municipal que vamos a desmontar en un futuro no muy lejano?, pensemos.
No tenemos sino dos opciones y considero que son las mismas, quizás inversas en el orden según la opción política de nuestra preferencia, en mi caso, considero que los revolucionarios debemos optar sin vacilaciones a la paz, a la vida, al progreso, al cambio dentro de la revolución, con consciencia, con criterio claro, optemos por las flores, en caso contrario, si los enemigos del pueblo que han generado el estancamiento del cuál somos víctimas (y no me refiero en términos económicos ni objetivos sino en términos subjetivos) lograran su cometido de intentar siquiera de manera fáctica de subvertir el orden constitucional y democrático apoyados por los gobiernos de derecha del continente, lacayos del imperialismo, no dudaré en ser fusil, es lo que la historia nos reclama.
Flor y Fusil, una dicotomía necesaria!
){kind=link}
Redes sociales