José Ángel Ramírez
LA FE MUEVE MONTAÑAS
El próximo sábado 4 de abril; en la víspera de la conmemoración de la Entrada Triunfal de Jesús a Jerusalén, tendría lugar la edición 251 de la Bajada de Los Palmeros de Chacao, tradición de fe y alto sentido ecológico, instituida en el siglo XVIII por el Padre José Antonio Mohedano en promesa para la erradicación de la fiebre amarilla que azotaba para entonces.
Este sacerdote encabezó junto a varios hacendados el envío de peones al majestuoso Waraira Repano (El Ávila), para que buscasen palmas que serían ofrendadas a los Santos si estos acababan con la terrible enfermedad. Es así como nace esta extraordinaria expresión de fe popular.
Para este año 2020, “La Bajada de Los Palmeros” aun cuando de manera multitudinaria por razones obvias no se realice, se cumplirá de manera simbólica, tendrá el valor agregado de revestirse con la Declaratoria de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad en la modalidad de “Buenas Prácticas, reconocimiento compartido con los Palmeros Asuntinos y del Valle del Espíritu Santo del estado Nueva Esparta; todo esto gracias al excelente expediente construido y validado por los promeseros-peones-practicantes de esta expresión en sus respectivas locaciones con el impecable, extraordinario y prolífico acompañamiento del Centro de la Diversidad Cultural (organismo adscrito al Ministerio del Poder Popular para la Cultura) que acertadamente dirige el Prof. Benito Irady junto a todo su equipo, entre los que cuentan los amigos George Amayz, Conchita Rodríguez, entre otros.
Es la séptima distinción mundial lograda por nuestra Patria, gestionada a encomienda del Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela al Centro de la Diversidad Cultural. Vaya igual agradecimiento a la Gobernación del estado Bolivariano de Miranda, a su titular Héctor Rodríguez, quien personalmente y a través de la Secretaria de Cultura ha estado presente en la cooperación y apoyo en esta gesta; igual tratamiento al Consejo Legislativo Regional, de manera especial a su Presidenta legisladora Aurora Morales, por ese calor y perenne acompañamiento; a la Alcaldía de Chacao, su Alcalde Gustavo Duque.
Como Red del Patrimonio y Diversidad Cultural del estado Bolivariano de Miranda junto a la Asociación Civil PALMEROS DE CHACAO, de manera particular con nuestro hermano Richard Delgado nos ovacionamos en esta proeza que ha merecido los mejores elogios de la UNESCO que exhorta a todo el planeta a asumirlo como ejemplo.
Este año cobraba fuerza la excusa para que expresiones patrimoniales mirandinas acudieran a este encuentro, intercambio y abrazo a manera de celebración con nuestros hermanos Palmeros de Chacao, entre ellas: los Bandos y Parrandas de los Santos Inocentes de Caucagua que esta año cumplirían 33 años ininterrumpidos acompañando la bajada, la Parranda de San Pedro de Guatire del CEA Andrés Eloy Blanco, sumarían 16 años haciendo lo propio. Estaba en pauta invitar de manera especial a las expresiones que hacen vida en la Red del Patrimonio y Diversidad Cultural de Miranda. A decir verdad, nos sorprendió de manera abrupta la pandemia del COVIT-19 derivando en que estemos presentes en “La Bajada” a manera de espíritu, de oración, de corazón, para que la Entrada Triunfal de Jesús sea invocada acompañada de “la entrada triunfal” de la salud a los enfermos por la pandemia y de otros males, para que le de luces a los estudiosos de la ciencia y consigan la cura, para que todos los fallecidos sean recibidos en la Casa del Padre, para que todos y todas experimentemos la Divina Misericordia de Dios.
¿Será que podemos invocar la intención ante Jesús del Padre José Antonio Mohedano?, ¿Será que a esta peste podemos exterminarla con esa fuerza impregnada en la oración? Llueve y escampa, seguro estamos que escucharemos nuevamente “el eco de de un palmero en la montaña”, esa montaña que sencillamente puede mover dos letras: FE.
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