Ticker

6/recent/ticker-posts

▷En memoria de Ruperta que estuvo presa 41 años✔

 

En memoria de Ruperta que estuvo presa 41 años y de los más de 50 animales que han muerto de hambre en los zoológicos venezolanos estos últimos años.


Los zoológicos dejaron muy atrás en la historia su condición de colección de animales para las élites. Hoy están democratizados para "divulgar conocimiento" y "fomentar la conservación de especies amenazadas", pero la verdad es que siguen resultando espacios que son el reflejo de la larga cadena de esclavitud a la que se ha sometido a los animales durante miles de años.

Cuando vemos a un ser que siente tristeza, dolor, ansiedad y busca la felicidad exactamente como usted y como yo, excluido de su medio ambiente natural, sometido a los rigores de lo que otros quieran hacerle o darle, imposibilitados de manifestar su comportamiento, nuestro referente universal es la prisión. La prisión existe para salvaguardar a la sociedad de un ser que, de estar libre perpetuaría su maldad.

En el caso de los zoológicos, todos los reos son inocentes.

Restringimos a los animales su capacidad de movimiento (por razones presupuestarias, espaciales o políticas) para que sean fuente de ocio o en el mejor de los casos objetos de observación. Les quitamos la posibilidad de construir vínculos sólidos, de tener una familia, de poder moverse, los sometemos durante toda su vida, día a día, a la mirada obsesiva e impertinente de visitantes. Grandes mamíferos, elefantes, tigres o leones, que deberían estar recorriendo miles de kilómetros en su peregrinar de vida, se encuentran confinados en pequeñas “cajas” para divertimento de transeúntes, que pasean indiferentes e ignorantes de la triste cotidianidad de estas víctimas a la que miran por algunos minutos distraídamente.

Sí, gracias la atracción que generan los parques zoológicos, se han financiado distintos proyectos de investigación para la conservación de especies amenazadas, pero estas especies son y serán condenadas a una, dos y hasta tres generaciones en cautividad para poder tratar de reinsertarlas en ambientes naturales, y en caso de no funcionar, vuelven a formar parte del ambiente hostil del que en principio se les trató de rescatar... y esta vez para siempre.

El león, el rey de la selva, que correría en libertad a 70 km por hora, cientos de kilómetros por día, se ve obligado a estar en un espacio de 40 metros cuadrados para siempre. Elefantes famélicos, derretidos de hambre y de pena, enfermos y solos, cuando son animales que nacen y pasan su vida en familia, lloran a sus muertos, disfrutan del amor de los suyos. Primates perturbados, enloqueciendo por la desesperación del encierro, por la ansiedad. Pájaros que jamás conocerán el cielo para el que fueron creados.

Todos tristes, parecen entender que la condena será a perpetuidad.

La paradoja está en que para conservar la vida de los animales, estemos arruinando justamente eso, bajo la eterna contradicción humana de generar un problema y luego desear resolverlo con otros más devastadores.

Por lo tanto la solución es al mismo tiempo estructural, multifactorial, transversal, compleja... y muy simple. Sin demanda no hay oferta en este caso, si usted no va al zoológico, éstos desaparecerán como atracción.

No pensemos en especies, pensemos en individuos, no pensemos en colectivos, pensemos en seres únicos que hoy sufren.

Piense en Simba, allá en el zoológico de Caricuao en Venezuela, con el hambre exponiendo su costillar, mientras golpea ansiosamente su cabeza contra una reja de menos de un metro de altura que hace las veces de techo, y recorre sin cesar su celda de 40 metros de soledad.

En el caso de los zoológicos, todos los reos son inocentes.

Mariant Lameda
Miembro de la Junta Directiva RAC

Si quieres recibir en tu celular este y otros artículos descarga Telegram, e ingresa al link https://t.me/lavozdeguaicaipuro2 y dale click a Unirme.
#LaVozDeGuaicaipuro / #EnciendeTuVoz
@COPYLEFT / TODOS LOS ERRORES RESERVADOS

Publicar un comentario

0 Comentarios